edición 2.0 y pelotudos.

1.- edición 2.0/

Me tocó ver con tristeza como el viernes pasado mis amigos de La Calle Passy 061 presentaban su catálogo de crítica online con 7 personas en el público. Y la tristeza me viene, no de los pocos idiotas sentados entre los que me incluyo, sino precisamente de saber que todo lo digital aún está en estado embrionario en un país que dice, gritando, ser Un país de poetas (nunca se especificó que eso significaba que era un puto país de No-lectores) país que además tiene una maraña de críticos que hacen nata en las conversaciones de bar pero que, sin embargo, no tiene tiempo de ir a ver cosa alguna que signifique renovación o al menos refresco. 
A mí lo de la página me traía hace días interesado y expectante y no decepcionó. Reconozco que a ratos me parece un poco de museo esto de recordar, pero siempre es necesario volver atrás.  Al menos me agrada la idea de que alguien se haga cargo de modernizar la cosa, de difundirla. Y ya no desde la Dibam (con toda su crueldad innecesaria) o desde la recomendación de los malos poetas con su necedad, usura, y academicismo de cuarta. 

Y si bien lo de la página aún no está listo al menos está, por ahí metido en alguna parte, pero está. _No falta que se caiga y me cague el post.

Bueno, toda esta reflexión weona se me viene de estar leyendo todo el día páginas inútiles por ahí, llenas de artículos weones o de traducciones que por poco se diferencian de una hecha con google translator (que lata oootra traducción mala más, paren con la weaa!). Me viene de ver decenas de páginas hipócritas que lo único que hacen es gastar luz; o revistas, pencas revistas, que sólo quieren pasar por agua a los amigos cercanos para luego cocinarlos a medio fuego en un encuentro o ponerlos a recitar a diestra y siniestra poemas que son ratones muertos colgando del techo. > Recuerdo una vez en que hablaba con un amigo quien, torpemente, trataba de convencerme de que una crítica literaria online era lo mismo que una que está puesta en papel [no es necesario describir que la conversación era de mierda y no llegamos a nada más que al asco]. Él sigue yendo por el mundo con la cabeza en alto, esperando a que dios le haga un guiño quizá o le salude, y yo sigo dejando caer las pestañas sobre el teclado. Él, y muchos, siguen poniendo 10 páginas de reseña en letras.s5 con la impunidad que entrega la no-lectura de los que pasamos de largo o cambiamos de link en la mitad de la paja de leer. Y lo gracioso es que creen que son inteligentes por ello.  Lo triste es que algunos ganan plata de mis impuestos con hacerlo o simular hacerlo.


2. pelotudos/

Cacha que en 2007, cuando hice el facebook de FUGA! hubo weones, no pocos, que miraban con asco y criticaban que eso era, según ellos, una forma innecesaria de dar a conocer el trabajo literario; que una editorial no necesitaba de ese tipo de juegos para trabajar... Si, pienso lo mismo, menos mal que los weones no se dedican a brujos, y es que al final la razón no me la dio el tiempo a la larga como a Nietzsche sino que la ridícula certeza de que en dos años o menos después del vaticino los mismo imbéciles que me daban consejos de difusión terminaron por poner sus vidas en el face. Y ahí andan, muy Me gusta No me gusta, apretando y mirando perfiles para tratar de entrar en este mundo que, precozmente, los dejó afuera parados en la puerta con sus plumas, frasquitos con tinta y papeles rayados envueltos en cuerina en la mano. Idiotas. 

Afortunadamente hay ejercicios que a contrapelo van dejando huella y surco. Así la gran Cinosargo de Rojas Pachas o la misma Calle passy han sabido meterle el dedito en el culito a los que creyeron que la escritura era siempre para el lado > para abajo y no en múltiples  direcciones. 



3.-Bien/


Me quedo con la satisfacción de que en 20 años más vamos a pasarla tan bien que no nos vamos a acordar de esta época en que el mail aún hace sudar a muchos por su exceso de tecnología. Ahí, cuando el silicio nos salga del culo a borbotones y todos los fomes mojigatos se hayan muerto de pena, disfrutaremos de las delicias geek de esta generación, pokemona y proautista, que canta y baila tan bonito. 

Ya, me aburrí. Chupa el píxel!

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